No todo está perdido…
En este mundo hostil y cada vez más lleno de maldad donde los humanos peleamos como fieras hasta por cosas sin importancia en ocasiones se cree que se vive en una sociedad descompuesta donde no hay esperanza de que se tenga un mejor entorno.
Peor se ve el panorama cuando vemos que en esta patria faltamos al juramento de querernos como hermanos y muchas veces en lugar de cuidarnos nos destrozamos y robamos, que la maldad le gana a la bondad. Pero la verdad, no todo está perdido.
Aún hay gente buena, que le preocupa el bien común, contribuye a que se tengan mejores sociedades, no se queda con lo que no es suyo y eso no es solo para agradecer a DIOS que existan personas honradas y de buen corazón sino para también hacer una reflexionar de lo bien que todos debemos actuar.
Mire, hace unos días un joven extravió su cartera, al parecer se le cayó al subirse al coche y no se dio cuenta, pero de esa pérdida el muchacho mucho gano.
El joven en la cartera aparte de la licencia de manejo, visa, credencial del INE, tarjetas de debido y crédito, traía sus amados bonos del correr, equipo de futbol local llamado correcaminos, y más de 2 mil pesos en efectivo que ya daba por perdidos.
Al día siguiente canceló las tarjetas de crédito y debido, en los bancos le reportaron no habían sido utilizadas y eso le hizo pensar que la cartera no le había sido robada y podía estar en buenas manos en algún lugar.
Igual se apresuró a reponer documentos, primero una serie de contratiempos para reponer las tarjetas pues en los bancos piden dos identificaciones, visa, INE y licencia estaban en la cartera extraviada, así es que a buscar la cartilla militar y pasaporte para poder hacer los trámites de reposición y activación de los nuevos plásticos, ahí la experiencia le quedo para ser más cuidadoso, pues hasta de los malos ratos se aprende.
La pérdida fue el jueves, el viernes tramites bancario, el joven tenía pensado el lunes acudir a la Oficina Fiscal para tramitar su licencia de manejo y al Instituto electoral para la credencial del INE.
Pero algo extraordinario pasó, el domingo cuando almorzaba en familia sonó el timbre de su casa, en la puerta se encontraba una pareja, Señora y Señor, sonrientes que preguntaban por el joven, él muchacho se identificó, y ellos le dijeron que lo buscaban para entregarle una cartera que habían encontrado.
Incluso comentaron que tenían un día buscando la dirección, luego de que el joven se identificó, el señor le dice “aquí está su cartera, solo la abrimos para ver a quien le pertenecía, pero ahí está todo completo”.
Cierto es que el Joven no solo recuperaba la cartera con sus pertenencias sino que constataba que existen los milagros, que hay gente honrada y eso fue más gratificante.
Porque la verdad no todos los días se encuentra gente de buena fe aunque si la hay, y a medida que todos actuemos bien habrá más, tendremos un mejor entorno, una mejor sociedad y un futuro mejor para las nuevas generaciones.
Quienes entregaron la cartera ni siquiera lo hicieron por recompensa, incluso bien pudieron quedarse con el dinero en efectivo y los bonos del correr para luego tirar la billetera sin mayores complicaciones, pero no lo hicieron.
Se tomaron el tiempo de buscar a la persona, entregarla con todo lo que portaba y a cambio no aceptaron nada, pero sus rostros reflejaban tranquilidad, satisfacción del deber cumplido, alegría de haber hecho una buena obra.
A pesar de la insistencia del Joven agradecido no aceptaron recompensa, ni siquiera más de lo que el muchacho traía en la cartera en efectivo o los bonos del corre, alegaron que ellos también son padres, que tienen una hija estudiando en Monterrey y que solo estaban haciendo algo que les gustaría hicieran con su muchacha. Seguro así será, porque quien actúa bien le va bien.
El mismo día que el joven recupero su cartera se puso de acuerdo con unos amigos, para agradecer la señal divina acudieran a entregar comida a hospitales, harán más acciones sociales para ayudar a los que menos tienen.
Quizá para muchos la acción no tenga nada de extraordinario pero la verdad si la tiene, no es solo el actuar de la pareja que entrego de buena fe la cartera, sino que los jóvenes también corresponden haciendo el bien, y en este mundo hostil eso es mucho.