A la cola, dijo Lola…
Si usted pasa de los cuarenta años y jugó rondas infantiles como la víbora de la mar seguramente recordará aquella frase de “a la cola dijo Lola”, que no era otra cosa que un exhorto a formarse para la participación ordenada en el juego.
La frase de “a la cola dijo Lola” también sirvió de disciplina y orden para evitar conflictos en el juego, quizá muchos mayores de cuarenta años la recuerdan, claro, a menos que sea priista y quiera ser candidato.
Porque es un hecho que a dos o tres personajes, a pesar que ya andan llegando o pasan el medio siglo, se les olvida la frase y las reglas, sin formarse quieren acomodarse en la lista de las candidaturas del 2018, lo peor, no quieren entender que lo primero es organizar el juego y luego elegir los participantes.
No cabe duda que a muchos priistas sus aspiraciones les hace perder de vista el interés por su partido y más allá de preocuparse por la restructuración del PRI y hacer un llamado a todos los tricolores para comenzar a trabajar por el bien de ese instituto político andan aluciados por una candidatura.
Sin importar las condiciones en las que se encuentre hoy día el PRI, en Tamaulipas a más de cuatro de ellos les mueve más el que la gente comience a verlos como candidatos.
Se les olvida que para pensar en candidaturas primero tienen que pensar en poner en orden al partido, no hay ni siquiera convocatoria que marque los requisitos para la renovación de la dirigencia del PRI en Tamaulipas pero varios acelerados ya hasta esperan el documento con los lineamientos para ser candidatos.
Lo peor es que muchos de ellos ni siquiera son capaces de pensar que una cosa es querer y otra muy distinta poder y no ven el 2017 donde se pueden fortalecer porque ya están visualizando el 2018 para alcanzar el poder.
Primero lo primero señores, antes de correr tienen que caminar, si no tienen un partido medianamente fortalecido en la próxima contienda electoral difícil será su actuar.
Cierto es que ahora se le apostará más a los personajes que a los institutos políticos porque el electorado ya no quiere saber nada de partidos pero, como dijera Cantinflas, ahí también está el detalle, no todos los que andan enloquecidos por una candidatura son garantía de triunfo, es más, ni siquiera les alcanza para una campaña competitiva.
La situación es que ni siquiera ha sido publicado el documento tricolor con los lineamientos para la renovación de la dirigencia estatal del PRI Tamaulipas, la mayoría de los próceres priistas poco se han preocupado porque este partido toque base y comience a caminar pero cada día que pasa aparecen más personajes enloquecidos por una candidatura en el 2018.
Grave el asunto para ellos porque, como si fueran muchas las senadurías, cada vez hay más personajes del tricolor que aparecen llevando como objetivo el convertirse en candidatos a senadores, insistimos, una cosa es querer y otra muy distinta poder.
Igual una cosa es ser candidatos y otra muy distinta que puedan ganar, las cosas no estarán fácil, la marca tricolor esta desgastada, pocas son las posibilidades y muchos los aspirantes.
A los nombres de ALEJANDRO GUEVARA COBOS, ENRIQUE CARDENAS DEL AVELLANO, OSCAR ALMARAZ SMER, EUGENIO HERNANDEZ que ya sonaban entre los tricolores como posibles candidatos a Senadores se suman los de RAMIRO RAMOS SALINAS, MARCO ANTONIO BERNAL GUTIERREZ y hasta BALTAZAR HINOJOSA OCHOA y a cómo van no dude que mañana aparezcan más, el problema es que solo será uno el elegido porque la otra posición será para una mujer, que a decir verdad, hasta ahorita no se ve quién.
De todos esos que se mencionan quizá los que tengan más posibilidades son ALEJANDRO GUEVARA COBOS, tiene capital político y buen apoyo federal, además se supone se la deben. OSCAR ALMARAZ SMER hoy por hoy es el mayor activo en funciones que tiene el PRI en Tamaulipas, trae capital político y amigos dispuestos a invertirle al proyecto. ENRIQUE CARDENAS DEL AVELLANO es el único priista que le está invirtiendo dinero al partido para que se lleve a cabo el proceso de la renovación de la dirigencia también trae capital político y económico, amén de que en cada municipio del estado hay colonias, calles y hasta escuelas con su nombre.
EUGENIO, RAMIRO, BALTAZAR, BERNAL tendrían que trabajar en diferentes aspectos, unos en limpiar sus nombres y otros en convencer que pueden ser garantía de triunfo, los derrotados, derrotados serán, difícil es que en la próxima contienda se puedan recuperar, menos si después del proceso electoral pasado poca actividad se les ha visto en territorio.
En fin, el caso es que en el PRI crece la lista de aspirantes a candidatos a Senadores, unos quieren brincarse los tiempos y espacios, los que ya estaban formados difícil será que quieran ceder sus lugares, es un hecho que como en viejo juego infantil, a muchos les dirán, “a la cola dijo, Lola”.