Agencias
Luego de seis años de gestión, Pagani ha desarrollado una versión descapotable de su superdeportivo Huayra Coupé, al que ha llamado Huayra Roadster con cambios estructurales y mecánicos que lo hacen más ligero, más resistente a la torsión y también más potente.
Hay dos tipos de techo a elegir para este modelo: uno rígido con la sección central acristalada y otro de lona, que puede guardarse en el interior del vehículo, ambos descapotables.
Pagani solo fabricó cien unidades del Huayra Roadster, todos ellos ya vendidos a un precio de 2 millones 406 mil dólares (47 millones 354 mil pesos mexicanos), sin impuestos. Es un vehículo para el que actualmente no existe competencia, pues cuenta con 764 caballos de fuerza, ni por potencia ni por precio.
El descapotable más cercano es el Ferrari 488 Spider, cuyo precio es diez veces inferior y con 669 caballos.
El chasis, al que Pagani ha bautizado como ‘Carbo-Triax HP52’, está fabricado a base de titanio y fibra de carbono, mientras que los subchasis del Huayra Roadster están hechos de acero con cromo, molibdeno y vanadio.
Esta versión descapotable es 80 kilos más ligera que la Coupé, y con una rigidez a la torsión mayor. El motor es igual que el del Huayra Coupé, aunque algo modificado de forma que su rendimiento sea todavía mejor. Lo fabrica Mercedes-AMG, funciona con gasolina y tiene 12 cilindros, una cilindrada de 5.9 litros y dos turbocompresores. La compañía no ha facilitado más datos respecto a sus prestaciones.
La caja de cambios, que provee el especialista X-Track, es manual de siete velocidades, pero con una peculiaridad: no tiene pedal de embrague, ya que un automatismo se encarga de accionarlo cada vez que el conductor cambia de marcha, ya sea con toques en la palanca o en las levas que el coche lleva tras el volante.
La suspensión, basada en la del Huayra BC de 751 CV, es un 25 por ciento más ligera que la del Huayra Coupé, y el control de estabilidad ha sido reprogramado para adaptarse mejor a las características propias de la variante Roadster.