La “Gustavomanía” quedó al otro lado del puente….de La Moderna

José Walle Juárez/ReporteTamaulipas
Sabado,13 de Junio del 2015

 

Victoria,Tamps.-Siempre lo hemos dicho; Gustavo Cárdenas Gutiérrez, ya no es aquél chicuelo que le asestó un duro golpe político al terco y tozudo  Manuel Cavazos Lerma, imponiéndose el “broncudo” victorense para ganar la Presidencia Municipal capitalina y de ahí dar continuidad a una larga carrera política que, no ofreció mayores resultados a las mayorías ciudadanos y sí probar suculentos manjares que le dieron la fuerza y el poder.

 

De esas mieles, el pueblo no disfrutó nada, nunca logró entender para que apasionarse por un personaje que no ofrecía realidades y su sueño siempre era la de ser agresivo en sus palabras, dándole el crédito necesario a cada una de sus acciones.

 

Ese es Gustavo, un  mitómano que todavía seguirá dando mucha guerra, porque sabe para que es el poder, para que es ganar espacios políticos, para que disfrutar de los viajes placenteros que le da la llamada “política a la mexicana”, dicho en otras palabras, los viáticos y el jugoso sueldo que espera comenzar a cobrar a partir del próximo día primero de septiembre del año en curso.

 

Es “bronco” en su expresión, sabe cómo llegarle a las masas populares, porque sus propuestas son las mismas, no ha tenido cambio alguno, sucumbiendo ante el materialismo, pensando siempre en el negocio y no en la atención a la problemática social.

 

Se deja impulsar por su instinto de conservación política, cada vez más indigna frente a la escasez de abundancia alimentaria y sed de justiciasocial.

 

La “Gustavomanía” ha quedado atrás y no diga que ha sido engañado, porque sabe y bien que sabe, que la política se hace con dinero.

 

Confundió los términos de la política social definida como una forma de intervención a nivel macro y que parte del estado en función de lograr algún tipo de justicia dentro de la sociedad concordante al modelo de desarrollo definido por el mismo estado.

 

 

Gustavo ganó perdiendo, porque marrullero como es (algo le aprendió a su maestro Manuel Cavazos Lerma) se registró como candidato de mayoría relativa y también como diputado de minoría.

 

Por supuesto que el pataleo político de Gustavo continúa, ahora que tiene un Partido a su plena disposición; el Movimiento Ciudadano, lo que aprovechará para buscar no la alcaldía de Victoria, sino por segunda ocasión la Gubernatura de Tamaulipas, aprovechando cuestiones coyunturales de otros partidos como el PAN, que se encuentra resquebrajado.

 

Ahí sus cartas fuertes para la sucesión de Egidio Torre Cantú, se encuentran muy deterioradas, y que lo obliga a retomar nuevos derroteros o bien luchar por su reunificación, porque el cañero César Augusto Verástegui Ostos, lejos de lograr la unidad, solo provocó la desunión en su claro afán propagandístico por allegarle más simpatías a su jefe político; Francisco Javier García Cabeza de Vaca.

 

El PAN no solamente se desunió, sino que también perdió en esta elección sino que también la fuerza y poder político que habían logrado acumular en los últimos 10 años;  las seis diputaciones federales que, por dos elecciones consecutivas habían ganado. Lo mismo sucedió desde hace dos sexenios con las dos senadurías de mayoría relativa.

 

La primera vez que el    PRI mordió fue perdiendo las seis diputaciones y  dos senadurías, éstas abanderadas por José Manuel Assad Montelongo y Amira Gómez Tueme, mujer reynosense que finalmente se quedó con el escaño de minoría, como pago a sus servicios otorgados a Eugenio Hernández Flores, desde que fue candidato a diputado federal.

 

 En la segunda elección, la dupla Manuel Cavazos Lerma y Guadalupe Flores de Suárez, también perdió estrepitosamente la elección y seis de ocho diputaciones, quedándose el marrullero del sombrero con la curul en el Senado de la República.

 

Pues bien, ante todo este sainete político, resurgió la figura de Gustavo Cárdenas, quien ahora ya está planeando la forma ganar la elección gubernamental, siempre y cuando su primo hermano Enrique Cárdenas del Avellano, no sea el candidato del PRI, quien emplearía la misma amenaza de irse al PAN o algún otro partido que aprovecha su capital político.

 

Esto me recuerda aquella frase motivacional: “lo mejor está por venir” que muchas veces escuché en voz del doctor Rodolfo Torre Cantú, que fuera un hombre sencillo, carismático, de raigambre popular, con una amplia capacidad de convocatoria, deseoso de que quien esto escribe fuera Presidente Municipal de mi pueblo: Jaumave, objetivo que no se logró en aquel entonces por l capricho de  Cavazos,  su protector del bolsillo Tomás Yarrington Ruvalcaba, hecho que trataremos en otra ocasión  y…