Letra grande y “Borbocha”

Sábado,06 de Junio del 2015 /www.reportetamaulipas.com
Ernesto H. Salgado
Columna: Plaza 

Letra grande y borbocha decía Doña Lolita a sus hijos cuando , en las mañanas, partían al colegio. Los uniformes viejos, apenas conservaban el azul marino que los distinguía de otras escuelas, pero olían a limpio y bien planchados, la raya del pantalón bien dibujada sobre las piernas. Ella se sentía orgullosa cada día cuando los despedía desde la puerta de su vivienda, una casa normal, clasemediera, en la sala el infaltable cuadro de la última cena y por supuesto, el retrato de su boda con Don Jesús.
Y ya saben, amonestaba casi gritando a los críos antes de que terminaran de partir, “como la serpiente y el águila” Lo que ella expresaba era que tenía uno que ser astuto como la serpiente y tener una mirada de águila que alcanzara para ver todo el panorama. Esto último ayuda para tomar mejores decisiones.
Como cualquier persona, ella vivió duras pruebas, tormentas que sin temple en el mando hundirían a cualquier embarcación pero siempre salió adelante.
Una tarde siendo yo un niño le pregunté Mamá ¿cómo puedes estar sonriendo en medio de todo esto que está pasando? Su respuesta fue simple: porque sé que está situación no puede durar más de tres días, más tarde saldrá el sol. De esa manera nunca perdió su sonrisa, su paz y tranquilidad que la caracterizaban.
Era de una lógica que no se podía refutar ¿Cuánto te queda de dinero? Le preguntaba mi papá; su respuesta: “ lo que queda de restar lo que gasté a lo que me diste”
Como buena mujer de la primera mitad del siglo pasado su vida giraba en torno a su casa, su esposo y sus hijos. No había más, era su mundo. Pero eso no la limitó cuando tuvo que salir y hacer frente a la vida para ayudar a su marido. Fue admirable.
Como madre nos perdonó a los hijos todo cuanto tuvo que perdonarnos y chancla en mano nos obligó a enderezar el camino. Y nos enseñó a perdonar.
Yo fui el único de los hijos que abandonó la casa paterna o debiera decir materna y viví ausente la mayor parte de mi vida, pero eso jamás indicó que viví lejos de ella. Ella, siempre, cada día estuvo presente con sus consejos en mi pensamiento. Sé que ella perdonó mi lejanía de tantos años.
Ayer Dios decidió abrirle las puertas del cielo y llevársela. Le doy gracias al Supremo Creador por haberme dado la mamá que me tocó. Le doy gracias por todas las cosas que me enseño, temple, carácter, fortaleza, y ánimo siempre dispuesto. Ayer Doña Lola murió. En noviembre cumpliría noventa y dos años de edad, todos sus hijos, estuvimos con ella. Sé que Jesús, mi Señor y Salvador una morada preparó en el cielo para ella y ahí afanosa debe de estar cambiando los muebles de un lado para el otro, para cuando lleguen sus hijos. Agradezco todas las muestras de solidaridad que me han manifestado y que reconfortan mi espíritu.
En tema aparte al parecer los regidores tricolores del cabildo de Matamoros ya se pusieron las pilas y como en otras ocasiones están exigiendo se transparente la otorgación de contratos y compras del ayuntamiento, como ejemplo en el tercer oficio con número 166/2015 se solicita el Padrón de Proveedores de las empresas o refaccionarias que abastecen las auto partes y demás refacciones que se utilizan en el taller y servicios generales de esta administración, así mismo la cantidad mensual facturada por cada proveedor. Firman los regidores, María Elena González Benavides, Eduardo García Avendaño, Argelio Nevárez Pérez, María del Carmen Vielma Alejandro y María Guadalupe Chapa Salinas.
Y mire Ud. Ayer Manuel Camacho Solís, ex jefe de gobierno de la Cd. De México, brazo derecho de Carlos Salinas, aspirante a la presidencia de la República y primer comisionado para la Paz en Chiapas, falleció, tenía 69 años de edad y era senador de la República.
También ayer se cumplió el sexto aniversario de la muerte de los niños de la Guardería ABC en Coahuila. Y finalmente en Guerrero, Oaxaca y Chiapas los que se dicen maestros miembros de la Coordinadora Nacional siguen esperando que el gobierno actúe y ponga freno a la violencia desatada por esas hordas magisteriales que encima de todos los destrozos ahora quieren que se les pague más dinero.
La sociedad espera que el gobierno intervenga y haga prevalecer el estado de derecho.