LO QUE NO DESCUBRE EL TIEMPO…

Miércoles,20 de Mayo del 2015 /www.reportetamaulipas.com  
Ernesto H. Salgado  
Columna: Plaza 

A menos de tres semanas de que concluya el periodo de campañas electorales para la renovación de la Cámara de Diputados es evidente que el Partido Revolucionario Institucional, a nivel nacional obtendrá un rotundo triunfo que permitirá al Presidente Peña Nieto contar con una cómoda mayoría que le permita, sin mayores negociaciones, terminar de estructurar el marco legal de las recientes reformas constitucionales, con las cuales colocará al país en un camino hacia un sólido progreso de bienestar.
Todo, en el discurso, suena bien, pero en la práctica mientras no se consolide de nueva cuenta una base social intermedia que sirva de colchón de amortiguamiento la República permanecerá en la antesala del estallido.
Mientras México siga ocupando uno de los últimos lugares en la lista de países del mundo y de América por los bajos salarios que percibe la clase trabajadora ningún programa de gobierno tendrá éxito y el fantasma de una nueva revolución estará presente sembrando inquietud y temor en todas las clases.
Los trabajadores viven en la miseria porque no tienen un buen ingreso, por consiguiente no pueden acceder a educación de excelencia y muchos, la mayoría no cuentan ni tan siquiera con acceso a la medicina social.
El discurso suena bien, en la TV. se mira mejor, en la realidad todo está al revés.
Los empresarios no producen para el mercado interior porque no hay quién compre y así los trabajadores tienen que producir bienes que nunca podrán adquirir.
Lo triste es que los partidos de oposición no muestran tener una idea clara de lo que el país requiere y más bien se trata, en el mejor de los casos, de un quítate porque sigo yo. Así lo probaron los doce años de panismo.
La izquierda es de risa y pena ajena. No hay opción así que más vale malo, que bueno por conocer.
A nivel estatal, el PRI tiene ventaja, no porque estén demostrando que lo pueden, sino porque ya los rivales demostraron que no pueden.
A nivel local es lo mismo, los rivales mostraron el cobre en menos del tiempo que se esperaba. Nunca la administración municipal había sido embargada, como lo fue la actual. Jamás el deterioro del poder público había sido tan evidente y el ciudadano común lo vive con todas sus consecuencias.
Esto sumado a la campaña inteligente que realiza Chuchín de la Garza, nos lleva a firmar que la victoria el 7 de Junio será para el PRI en el IV Distrito y en por lo menos otros seis de los distritos electorales de Tamaulipas.
Silenciosa, Nora Domínguez trabaja desde la sombra, vigilante de que Chuchin cumpla con la estrategia señalada y los resultados saltan a la vista. A estas alturas de la campaña, es más claro que el agua que Chuchín supera con mucho a su más cercano competidor Jorge Rentería, el Independiente. Por su parte el candidato del PAN se quedó atrás, muy atrás con todo y la gritería apagada y sin ánimo de los jovencitos que por cien pesos al día trabajan cargando banderolas y portando camisetas azules.
El panorama está muy claro y cada día que transcurre se robustece la convicción de que el PRI recuperará los espacios perdidos en la pasada elección.
Cambiando de canal, es tonificador saber que los tiempos cambian y si hay escándalos de corrupción es porque salen a la luz pública. Ejemplo de ello lo que ocurre en el Instituto Tecnológico de Matamoros, en donde voces disidentes sacaron a la luz lo que debía permanecer oculto: la liberalidad con que es manejada la máxima casa de estudios de la región.
Resultado de ello, y como prueba de que las cosas cambian, un grupo de expertos enviados directamente de la SEP arribaron para auditar al ITM. Muchos nuevos maestros que disfrutan de las plazas que libremente otorgó la directora podrían quedar desempleados, independiente de las consecuencias legales que podrían acarrear para la prima del Ex gobernador y hoy senador Manuel Cavazos Lerma.
Bien dicen que lo que no descubre el agua lo descubre el tiempo. Veremos y diremos.
Por lo pronto los maestros disidentes están a la espera de los resultados de la auditoría.
Y como una golondrina no hace verano hay que estar pendientes de lo que puede ocurrir en otros niveles en donde los ciudadanos han presentado denuncias públicas por mala administración, corrupción e incluso actos ligados con la delincuencia. Son muchos los casos y el ciudadano no olvida, está a la espera de que se haga justicia.
En lo personal tengo fe en el presidente Enrique Peña Nieto y en el gobernador Egidio Torre Cantú; sé que en el tiempo justo, adecuado, preciso, harán efectivo el marco legal y muchas cabecitas caerán para regocijo del auditorio.
La atención, por otro lado, está centrada en “El Bronco”, el candidato independiente al gobierno de Nuevo León; las encuestas lo sitúan muy por delante de sus contrincantes PRI y PAN, en ese orden.
Y los ataques que le lanzan Televisa y aztecos lo confirman. Si lo atacan es porque lo ven como un rival real sobre el que no tienen control.
De ganar El Bronco la elección en Nuevo León abriría una nueva etapa en la vida política nacional y abriría espacios para augurar el final de la partidocracia.
El Estado Mexicano tendrá que buscar otras formas de control político, los partidos dejaron de serlo y cuestan muy caros. López obrador tendría más oportunidad como candidato independiente que como abanderado de Morena, con todo y que ese membrete es de su invención.
La ciudadanía no cree en naranjos o azules o tricolores.
En Tamaulipas son varios los candidatos independientes que buscan una diputación federal, de ellos el que más se acerca es Jorge Rentería; veremos y esperaremos. Por supuesto que muchos pueden creer que al final los independientes le harán el favor a alguno de los grandes partidos con los que puedan tener intereses, esto es política a la mexicana en donde todo es posible.
En la burocracia es común ver grandes batallas por la defensa “del escritorito”, la secretaria, el director de área, el oficial mayor, el subsecretario; todos pelean su territorio, territorio las más de las veces pequeño, se limita al tamaño del escritorio, pero eso les hace sentir poder y están dispuestos a defenderlo con todo y contra todo. Cualquiera que se acerca es una amenaza a su pequeña zona de confort. Y detrás de esta guerra territorial está el complejo de inferioridad, tan grande como la soberbia que dejan ver sentados atrás de su escritorito. Éstos son los que alimentan la campaña política, los que defienden el escritorio y los que quieren ocuparlo. Claro que estas batallas se dan en todos los ámbitos y tienen más su origen en los celos que en situaciones reales, y los celos son alimentados por la imaginación del que se sabe inferior. Todo esto se vive a diario en la direcciones de los planteles del sistema educativo. Por eso se tuvieron que inventar, supervisores de área, de zona, regionales, y coordinadores, igual de área, de zona regional, y estatales y nacionales, había que darles trabajo a todos cuidando de no tocar los espacios territoriales de cada quien, evitando de esa manera que las diferencias entorpecieran la buena marcha de la educación.
Y en otro orden de cosas y para despedirnos le platico que nuestro buen amigo Miguel Picazo está por estrenar su periódico digital La Razón, por lo que le deseamos el mayor de los éxitos.