Retrata fotógrafo los últimos 50 años de Reynosa

“El pasado reciente de Reynosa a 50 años”, será la exposición donde el neoladerense, expondrá sus más de 400 fotografías, que permitirán conocer el desarrollo económico, cultural, político y social que se ha registrado durante las últimas cinco décadas, donde destacan el paso de los huracanes “Beulah”, “Gilberto” y “Alex”.

“La intención es que la población conozca las transformaciones que hemos tenido, que los jóvenes y aquellos que han llegado de otros estados e incluso países, se enteren de una manera ágil de la historia y crecimiento de una de las ciudades más dinámicas del país”, refirió.

A sus 72 años de edad, Jesús Cavazos continúa activo como fotógrafo oficial del ayuntamiento local, período que le ha permitido retratar a nueve presidentes de la República, nueve gobernadores y 20 presidentes municipales.

“Hasta donde sé, soy el único fotógrafo en Tamaulipas que he tenido la oportunidad de retratar a nueve presidentes de México, desde Gustavo Díaz Ordaz hasta Enrique Peña Nieto”.

Indicó que comenzó a laborar en la, época en la que se iniciaba un proceso electoral en la entidad, por lo que fue invitado a incorporarse como fotógrafo del entonces candidato a la alcaldía de Reynosa, Rodolfo Garza Cantú.

Cavazos Reyes, quien ha tenido que pasar de la cámara manual a la digital, señaló que a lo largo de los últimos 50 años ha tenido la oportunidad de captar no sólo el crecimiento demográfico de Reynosa sino, el empresarial, industrial, hotelero, gastronómico, deportivo, cultural y social, entre otros sucesos que han marcado a esta ciudad.

Asimismo, mencionó que el 85 por ciento de sus rollos los conserva en blanco y negro, en 35 milímetros, por lo que desde hace algunos meses inició el proceso de digitalización, para poder donar al menos unas cinco mil fotografías a la fonoteca municipal, que lleva su nombre.

Contó que a lo largo de medio siglo ha echado mano de todo para poder sacar adelante su trabajo, mismo que en más de una ocasión ha sido censurado, rememorando que en una ocasión, en 1971, un guardaespaldas del entonces presidente Luis Echeverría, le arrebató su cámara y le quitó el rollo fotográfico, argumentando que no estaba permitido tomar fotos.