Sergio y Mónica: nacieron priístas

Martes, 11 de Febrero 2014 / www.reportetamaulipas.com 
Héctor Garces 
Columna: El Kiosko 

La presencia de Gustavo González García en la rueda de prensa ofrecida ayer por los
nuevos dirigentes del PRI en Tampico, Sergio Villarreal Brictson y Mónica Villarreal Anaya,
confirma lo que aquí se comentó en días pasados: es parte del origen de la participación
política del ahora presidente tricolor jaibo.
Quienes no entienden (algunos por profunda ignorancia y otros manipulados por visiones
sesgadas que esconden otros intereses) los vínculos y los lazos de la clase política priista
tampiqueña, deberían observar el pasado y analizar hasta los nexos familiares, sin olvidar,
por supuesto, los padrinazgos reales, los que encauzaron y enseñaron el camino.
Gustavo González García fue alcalde de Tampico en el trienio 1984-1986, una vez que el
entonces gobernador Emilio Martínez Manautou, respaldó su aspiración para ser presidente
municipal. Sin embargo, antes el mandatario estatal tuvo que consultar a quien detentaba el
poder prácticamente absoluto de la zona sur: Joaquín Hernández Galicia.
Si bien, en primera instancia, Gustavo González García no formaba parte de ‘la corte’ de ‘La
Quina’, su llegada a la alcaldía de Tampico lo conduce a establecer una relación muy
estrecha con quien se autonombraba ‘guía moral’ del sindicato petrolero.
Al grupo quinista ya pertenecía un político que acababa de ser presidente municipal y que
iba a construir una de las trayectorias más consistentes en el quehacer político local, estatal
e, incluso, nacional: Joaquín Contreras Cantú.
Con la llegada de la generación priista de la década de los noventas, apareció un inquieto
joven que además de ser empresario deseaba participar en la vida política de la ciudad:
Gustavo Torres Salinas.
Para alcanzar la meta que se había trazado, el joven se acercó a los sabios del partido
tricolor, dos de ellos, ex alcaldes: Joaquín Contreras Cantú y Gustavo González García.
También se apoyó, desde entonces, en otros dos personajes: Carlos Echazarreta Delgado y
Raymundo Vázquez Pecina (para algunos, ellos también debieron haber sido presidentes
municipales, pero la política depende del factor denominado circunstancia).
Ese hilo conductor deriva en la rueda de prensa ofrecida ayer, en la presentación de Sergio
Villarreal Brictson y Mónica Villarreal Anaya como presidente y secretaria general del comité
local del PRI, respectivamente.
Ahí, junto a los nuevos dirigentes del priismo jaibo, estuvieron Gustavo González García y 

Carlos Echazarreta, quien fue designado presidente de la Comisión de Procesos Internos,
organismo que dictaminó el arribo de quien es sobrino de Javier Villarreal Salazar (ex
tesorero estatal) y de la hija de Américo Villarreal Guerra (gobernador de Tamaulipas).
En la rueda de prensa estuvo otro amigo de Gustavo Torres Salinas: el empresario
agricultor José Manuel Arguello Rey, quien es, no se debe olvidar, alcalde suplente y ex
presidente del PRI local. En otras palabras, la mano del primer priista de la ciudad se reflejó
en la presentación en sociedad de la nueva dirigencia tricolor.
Además de que es evidente la mano del primer priista de Tampico en la decisión tomada
para integrar el comité del priismo local, los perfiles de los nuevos dirigentes dejan en claro
que traen la camiseta tricolor desde que nacieron.
Al tomar la palabra, Mónica Villarreal sintetizó su historia partidista con una frase para
recordar: ‘Soy priista desde que nací’. El mensaje fue conciso, directo y contundente.
Agregó, por supuesto, el ADN que porta: ‘He tenido esa vocación de servicio que he
aprendido de un estilo de vida de mis padres y posteriormente lo he ido reafirmando en
oportunidades que me han dado de estar trabajando en el gobierno del estado’.
Sergio Villarreal también trae en las venas su gusto por la política: su tío, Javier Villarreal
Salazar, fue secretario de finanzas del gobierno de Tamaulipas y alcalde de Ciudad Mante;
su primo, Javier Villarreal Terán, fue presidente municipal de Mante, diputado local,
secretario de Turismo del gobierno estatal y delegado del PRI en Tampico en la elección de
2007, cuando Fernando Azcárraga López ganó por segunda ocasión la alcaldía.
Con esos familiares directos, está más que claro que Sergio Villarreal Brictson nació con la
camiseta priista puesta. Por si fuera poco, en la pasada campaña se metió de lleno al
trabajo de campo y conoció a todas las lideresas y líderes de colonos de su sector, el ‘Area
6′, que comprende Infonavit.
El nuevo líder del PRI jaibo también ha hecho grandes amigos en el tricolor: Oscar Luebbert
Gutiérrez, ex senador y ex alcalde de Reynosa, es uno de ellos; Heriberto Florencia, de la
Universidad del Golfo, es su gran cuate; y con la ex alcaldesa Magdalena Peraza Guerra
mantiene una estrecha amistad. Por supuesto, el exitoso empresario Eduardo Vela Ruiz
también es su amigo.
Esos son los orígenes y perfiles de quienes asumen la responsabilidad de conducir al
Revolucionario e Institucional a la victoria en las urnas en el proceso de 2015, cuando el
priismo busque recuperar la diputación federal.
Así lo dijo Sergio Villarreal: ‘Vendrán los retos electorales, el año 2015 y ese será uno de
nuestros principales retos, tenemos 15, 16 meses para trabajar en el próximo proceso
electoral que viene, ese es nuestro principal reto al final del camino’.
Para obtener el triunfo, el dirigente tricolor porteño señaló que se deberá ampliar la base del
partido, estableciendo un contacto directo con otros segmentos de la sociedad. Ese es uno
de los retos. Ya veremos si Sergio y Mónica cumplen con los objetivos. Deberán trabajar
duro, pero eso no los espanta.